Victor Van Doom
Doctor Doom
Historia:
Insensible por la adversidad, Victor Von Doom sabe muy bien lo que es ser malentendido y desamparado, buscado y despreciado. Huérfano a una joven edad, fue criado por gitanos en la pequeña nación balcánica de Latveria –constantemente en movimiento, sin un lugar para llamarle hogar. Angustiado por la muerte de sus padres, el joven Doom juró hacer pagar al mundo entero por su pérdida. A través de años de intenso estudio, el decidido joven amasó una fortuna en conocimiento científico y místico. Así como la obsesión de Doom por el poder y la venganza creció, sus persecuciones académicas y asombrosa reputación le hicieron ganar una beca completa a la Universidad Estatal en América. Allí, el inteligente pero arrogante Doom conoció por primera vez a Reed Richards, similarmente dotado pero humilde por defecto. Richards representó una sustancial amenaza a la autoproclamada superioridad de Doom, y los dos se volvieron amargos rivales.
Finalmente, Doom fue arruinado de su ego, que le impidió ajustar los esquemas a una de sus primeras invenciones: un dispositivo de proyección transdimensional. La máquina trabajó perfectamente... durante 2 minutos 37 segundos. Entonces, Doom experimentó el resultado final de su orgullo: una explosión que dañó su rostro. Aunque Richards había señalado los cálculos erróneos de su compañero de clase antes de la desgracia, Doom se negó a reconocer su propia culpabilidad. En cambio, culpó a Richards por el accidente. Era más fácil para Doom creer que su rival había saboteado su trabajo por celos que admitir su propia imperfección.
Finalmente, Doom fue arruinado de su ego, que le impidió ajustar los esquemas a una de sus primeras invenciones: un dispositivo de proyección transdimensional. La máquina trabajó perfectamente... durante 2 minutos 37 segundos. Entonces, Doom experimentó el resultado final de su orgullo: una explosión que dañó su rostro. Aunque Richards había señalado los cálculos erróneos de su compañero de clase antes de la desgracia, Doom se negó a reconocer su propia culpabilidad. En cambio, culpó a Richards por el accidente. Era más fácil para Doom creer que su rival había saboteado su trabajo por celos que admitir su propia imperfección.
Mientras estaba convaleciente, Doom descubrió que la explosión le había dejado una larga y delgada cicatriz. El vano Doom creyó de hecho que esta leve lesión había desfigurado totalmente su cara. Expulsado de la universidad por su peligroso experimento extradimensional, viajó por el mundo envuelto en vendajes –una clase de momia viviente, buscando una cura milagrosa. Con el tiempo, Doom descubrió un pueblo de monjes tibetanos, quienes fabricaron una armadura y una máscara de metal para ocultar su percibida deformidad. En su urgente deseo de proceder con sus planes de conquista y venganza, Doom se colocaba recientemente su rostro de metal antes de ser enfriado completamente, dañando permanentemente su rostro entero. Con su oculto semblante con cicatrices y cuerpo envuelto en la casi impenetrable armadura de los monjes, Doom regresó a Latveria. Derrocando al gobierno en pie, se instaló como el monarca absoluto.
Gobernando con un puño de hierro y una voluntad igualmente fuerte, Doom estableció una nación de paz y prosperidad. Cuando Latveria creció bajo el reino de Doom, el megalómano dictador comenzó a creer que podría extender su éxito a otras naciones de la Tierra. Por consiguiente, comenzó a remitir los recursos de la pequeña nación para ayudarse a comprender sus planes de dominación mundial. Para Doom, los líderes del mundo son como nada, inferiores para ser puestos del lado de su visión global. Con el tiempo, las maquinaciones de Doom le trajeron conflictos con Richards –ahora mejor conocido como Mr. Fantastic, líder de los Fantastic Four. Richards y sus compañeros de equipo han sido los más frecuentes oponentes de Doom a través de los años. Ahora, los sueños de Doom de conquista mundial sólo son igualados por su deseo de destruir a los Fantastic Four.
A pesar de incontables esfuerzos, las derrotas de Richards por Doom han sido entre pocas y lejanas –y nunca completas o duraderas. La creencia de Doom en su propia superioridad frecuentemente demuestra ser su perdición, como su exceso de confianza y ciega arrogancia hacia sus propios fracasos. Él tiene, sin embargo, superado a su amargo rival en por lo menos una ocasión, anotando una victoria psicológica mayor cuando fue llamado para salvar la vida de Sue, la esposa de Richards; y su segunda hija. Concebida en un reino de otra dimensión, la venidera niña había comenzado a emitir ondas de energía negativa de alta intensidad. Human Torch supo lo de su hermana y que la bebé moriría sin la ayuda. Con Richards detenido por fuerzas exteriores, Doom tuvo su mejor y única esperanza. Johnny Storm imploró a su más grande enemigo apartar sus diferencias del pasado para que Invisible Woman y su hija tuvieran una mínima chance de sobrevivir. Aprovechando la oportunidad, Doom salvó ambas vidas a través de una combinación de ciencia y hechicería, inflando el ego del autócrata blindado y enviando a volar su confianza en sí mismo. En deuda con Doom, Sue acordó permitirle nombrar a la niña; entonces él puso a Valeria bajo su protección real. Ahora, cada vez que Reed mira a su hija y esposa, recordará que Doom salvó a ambas cuando él no pudo.
Gobernando con un puño de hierro y una voluntad igualmente fuerte, Doom estableció una nación de paz y prosperidad. Cuando Latveria creció bajo el reino de Doom, el megalómano dictador comenzó a creer que podría extender su éxito a otras naciones de la Tierra. Por consiguiente, comenzó a remitir los recursos de la pequeña nación para ayudarse a comprender sus planes de dominación mundial. Para Doom, los líderes del mundo son como nada, inferiores para ser puestos del lado de su visión global. Con el tiempo, las maquinaciones de Doom le trajeron conflictos con Richards –ahora mejor conocido como Mr. Fantastic, líder de los Fantastic Four. Richards y sus compañeros de equipo han sido los más frecuentes oponentes de Doom a través de los años. Ahora, los sueños de Doom de conquista mundial sólo son igualados por su deseo de destruir a los Fantastic Four.
A pesar de incontables esfuerzos, las derrotas de Richards por Doom han sido entre pocas y lejanas –y nunca completas o duraderas. La creencia de Doom en su propia superioridad frecuentemente demuestra ser su perdición, como su exceso de confianza y ciega arrogancia hacia sus propios fracasos. Él tiene, sin embargo, superado a su amargo rival en por lo menos una ocasión, anotando una victoria psicológica mayor cuando fue llamado para salvar la vida de Sue, la esposa de Richards; y su segunda hija. Concebida en un reino de otra dimensión, la venidera niña había comenzado a emitir ondas de energía negativa de alta intensidad. Human Torch supo lo de su hermana y que la bebé moriría sin la ayuda. Con Richards detenido por fuerzas exteriores, Doom tuvo su mejor y única esperanza. Johnny Storm imploró a su más grande enemigo apartar sus diferencias del pasado para que Invisible Woman y su hija tuvieran una mínima chance de sobrevivir. Aprovechando la oportunidad, Doom salvó ambas vidas a través de una combinación de ciencia y hechicería, inflando el ego del autócrata blindado y enviando a volar su confianza en sí mismo. En deuda con Doom, Sue acordó permitirle nombrar a la niña; entonces él puso a Valeria bajo su protección real. Ahora, cada vez que Reed mira a su hija y esposa, recordará que Doom salvó a ambas cuando él no pudo.
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